La necesidad de poner en marcha procesos de evaluación sistemática de la calidad desde modelos y procedimientos internos o externos está de sobra justificada en el contexto de las organizaciones educativas actuales. Junto a la finalidad y orientación a la mejora continua y la innovación progresiva de las instituciones sometidas a procesos de evaluación se imponen cada vez más razones de transparencia, rendición democrática de cuentas ante la ciudadanía, razones de eficacia /eficiencia, así como garantía de buen funcionamiento y ajuste a exigencias básicas sobre indicadores de comparabilidad homogéneos y fiables.

La evaluación está justificada como herramienta de aseguramiento y credibilidad en el valor y mérito de las instituciones, de los programas y de las acciones formativas que desarrollan las organizaciones; permitiendo a la sociedad tener confianza en ellas mediante procesos de control y seguimiento que contribuyen también a evitar fraudes, estafas y acciones de baja calidad que no se corresponden con las ofertas y servicios comprometidos. La evaluación es por tanto, también, un instrumento de entrenamiento en la mejora continua, así como de saneamiento y regeneración de los sistemas educativos universitarios y no universitarios.

Los nuevos modelos de calidad total se apoyan en propuestas de integración de dimensiones que abarcan facetas de la calidad diversa como reputación, capacidad innovadora, éxito, movilización social, perdurabilidad y estabilidad, resultados y productos, adaptabilidad, atención a demandas y necesidades, liderazgo prospectivo,…

La implantación de procesos de acreditación, certificación y auditorías en las instituciones de Educación Superior también ha llegado a los Conservatorios de Música y Danza como un instrumento de modernización y europeización de su actividad formativa. Conocer y debatir sobre estas cuestiones constituye una posición de ventaja para la toma de decisiones sobre la planificación estratégica de las instituciones de enseñanza. La regulación normativa de los procesos evaluativos universidades y centros de educación superior constituye una exigencia derivada de la plena integración de nuestro país en el contexto de la Unión Europea, lo que conlleva una mayor apertura a nuestros modos de proceder contribuyendo a favorecer un mayor grado de homologación y flexibilidad en los sistemas. Sin embargo, la falta de tradición en el empleo de este tipo de herramientas al servicio del desarrollo de las organizaciones y la mejora de los programas despierta resistencias que impiden poner en valor la utilidad y necesidad de los mismos.

José Gutiérrez Pérez. Catedrático de Métodos de Investigación y Diagnóstico en Educación en la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Granada. Coordinador del Grupo de Investigación “Evaluación en Educación Ambiental, Social e Institucional”, reconocido con el II Premio Nacional de Investigación Educativa en 2004 por el Ministerio de Educación y Ciencia.

Ha sido Vicedecano de Prácticum y Nuevas Tecnologías en la Facultad de Ciencias de la Educación, Director del Secretariado de Evaluación de la Calidad Docente en el Vicerrectorado de Planificación, Calidad y Evaluación de la Universidad de Granada, Director del Máster de Formación Profesorado de Enseñanza Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional e Idiomas (2009-2013).

Desde 2014 es Responsable del Área de Evaluación y Acreditación Universitaria en Dirección de Evaluación y Acreditación de la Agencia Andaluza del Conocimiento, coordinando los procesos de Verificación, Seguimiento y Renovación de la Acreditación de las titulaciones universitarias de la Comunidad Autónoma Andaluza.

Entre sus publicaciones recientes destacan los trabajos recientes publicados en revistas como Science Communication (2017), International Journal of Global Warming (2017), Higher Education Policy (2018), Psyecology (2018), Water (2018), todos ellos centrados en la investigación científico-matemática, la educación para la sostenibilidad y la investigación sobre comunicación, educación y representaciones sociales del cambio climático.